Narras tu:
Estaba en mi cuarto. Aun no había terminado de desamparar y todo estaba hecho un desastre. Estaba acostada en mi cama, leyendo y escuchando música cuando me di cuenta de la hora. Debía cambiarme para salir con Caleb. Iba a ponerme a ello pero de pronto mi laptop cometo a soñar. Era una videollamada. Mire quien era y contesté.
Tu:Mamá!
Kate:Hola, Ali( que conste que es un apodo de Alex y no por Austin y Ally, lo escribí diferente por si acaso). Qué tal va todo por ahí?
Tu:Oh.. Bien. Como siempre. El hijo de los Thompson ha venido a quedarse un tiempo.
Kate:Ah, si. Tu papá me lo contó.
Tu:Si. Eh... En un rato saldré con él. Me ha invitado a una galería de arte.
Kate:Tu? Una cita? Con Caleb Thompson? Genial, hija!
Tu:N-no es una cita.-sonrojándome un poco.-Bueno... No exactamente. Ni siquira se si me gusta de verdad.
Kate:Bueno, es un buen momento para averiguarlo. Dime, que te pondrás.
Tu:Eh... Pues en realidad solo iba a cambiarme de camiseta.
Kate:Alex, vas a una galería de arte, y... Hija se que no te gusta mucho pero no es un lugar para ir con jeans y camisetas. Ponte algo mas formal, no crees?
Tu:Ok. Tienes razón. Pero...
Kate:Mira en una de las cajas que tienes en tu cuarto. Le dije a tu padre que mandara que la dejaran allí. Es blanca y tiene sellos de Londres.
Busque entre todo el desbarajuste que había hasta que porfin encontré una caja con la descripción indicada. La abrí. Estaba llena de vestidos y todos eran hermosos.
Tu:Wow, que es todo esto?
Kate:Son un regalo. Eran míos cuando tenía tu edad. Pensé que te gustarían.
Tu:Sin preciosos, gracias.
Kate:Vamos, escoge uno y pruébatelo.
Hicé lo que me pidió y me lo puse:
Me lo pase genial esa tarde. Caleb era muy amable y todo el tiempo se preocupaba por que me lo estuviera pasando bien. Estaba empezando a pensar que verdaderamente me gustaba.
Acababa de volver a casa y eran las 8:30. Me cambie y me puse algo comodo
y decidí continuar desembalando.
Acababa de comenzar cuando me llegó un mensaje. Era Joe. Quería queduera a la discográfica para ayudarlo con algunas cosas. Eso era lo peor de mi trabajo. En principio tenía un horario pero si Joe necesitaba cambiar la hora podía hacerlo libremente.
Cogí mis llaves y mi chaqueta y bajé.
Jonh:A donde vas, señorita?-me detuvo antes de que saliera.
Tu:Eh... Me han llamado del trabajo. Tengo que ir a ayudar.
Jonh:Esta bien. No vuelvas muy tarde, ok?
Tu:Aja-asentí.
Ya en la discográfica subí donde Joe y me dejó el trabajo mientras el hacia su parte en la sala de informática.
Llevaba un rato trabajando cuando llamaron a la puerta, que estaba abierta.
Me giré. Ross estaba parado en el marco de la puerta, recostado contra él.
Tu:Ross, que haces aquí?
Ross:Oh, me dejé unas cosas aquí. Iba a irme ya a casa pero me acordé y vine a buscarlas. Te vi a qui y pensé en ver que tal estabas.
Tu:Ah, pues... Bien, supongo.
Ross:Creí que ya habías terminado por hoy. Que haces aun aquí?-sentándose confianzudamente en una de las sillas a mi lado.
Tu:Joe me ha llamado. Necesitaba ayuda con unas cosas.
Ross:Oh, te queda mucho?
Tu:En realidad... Vastante.
Ross:Has comido ya?
Tu:Eh...-mi estomago rugió.
Ross:Jaja. Creo que eso es un no. Ven aquí.
Cogió mi silla por debajo y aprovechando las ruedas me acercó con ella hasta él. Estábamos hombro con hombro. Después abrió su mochila y sacó una bolsa de comida china.
Ross:Tus favoritos son los tallarines, verdad?
Tu:S-si.-desconcertada.-Ross... Ya sabias que estaba aquí verdad?
Ross:Eh... Si, puede que viniera hace un rato y Joe me contara que estabas aquí así que, como sabia que tardarías, fui a comprar algo de comida. Tal vez.
Comencé a reír.
Tu:Gracias.
Comenzamos a comer y mientras tanto yo iba trabajando. Estabamos en silencio cuando:
Ross:No sabia que tenias novio-me soltó de golpe.
Tu:Que?!-atragantándome un poco con los tallarines.
Narra Ross:
Ross:Eh... Si, bueno. Hoy te vi y...
Tu:Oh, hablas de Caleb. No. Es solo... Un amigo.
Ross:Ah. Y... Te gusta?-tratando de no parecer preocupado.
Tu:P-por que me preguntas eso?
Ross:Bueno, no se. Somos amigos, no? Los amigos se cuantas esas cosas.
Tu:Eh... Supongo. Tal vez. No se.
Tal vez? Como debía tomarme eso?!
Tu:Y tu?
Ross:Yo?
Narras tu:
Tu:Desde cuando estas con esa chica?-algo incomoda.
Ross:Oh, con Maya? Desde hace unos meses.
Tu:Ah. T-te... Gusta mucho?
Ross:La verdad es... Qué si.-inexplicablemente siento como si me quebrara por dentro. En mil pedazos.-Si. Eso creo.
Tu:Me alegro por ti.-tratando de no parecer decepcionada.-Yo... Debería seguir con esto.-volví a concentrarme en el trabajo.
Pasó un rato y sentía como Ross no paraba de mirarme. Me giré para verlo. Estaba apoyando la cabeza en una mano y tenía sus ojos clavados en mi.
Tu:Ross... Por que no dejas de mirarme?
Ross:Ah, esto...yo... Solo... Me aburro un poco. Nada mas.
Tu:Puedes marcharte a casa. Lo sabes, verdad?
Ross:No. Espera. No quería decir que me aburriese estando contigo. Digo... Estaba aburrido por no hacer nada pero... Cuando te veo... Quiero decir... Me gusta verte trabajar. Te vez concentrada y...*hermosa.*
Tu:Ok. Entiendo.-reí un poco. No sabia por que se había puesto nervioso pero se veía tierno.
Ross:Oh, tienes... Espera. Tienes una...-tomo delicadamente un mechón de mi cabello y quitó una pequeña hoja.-Ya.
Tu:Eh... Gra-gracias.-estaba muy cerca.
Ross:Yo...-me acaricio suavemente la mejilla y comenzó a acercarse. Estabamos a pocos cuentimetros.
Cerré los ojos instintivamente e hice lo mismo.
Joe:Hey, Alex.-abriendo la puerta.
Nos separamos rápidamente. Que había estado a punto de pasar.
Joe:Oh, hola Ross. Veo que sigues aquí. Alex has terminado ya?
Tu:Ah... Si. Ten. Yo... Debo volver ya a casa.-cogí mi chaqueta y salí torpe y rápidamente.
SIGUEEEE QUIERO SABER QUE PASO*me hago volita*
ResponderEliminarp.s te gusti mi novela?
Si. Es muy buena
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