y bajé rápidamente las escaleras.
Tu:Hola.-dije rápidamente y sin mirar mientras me dirigía a la cocina.
Pero de pronto me di cuanta.
Tu:C-Caleb?-volví la vista hacia él.
Caleb:Cuanto tiempo, Alexandra.
Tu:V-vaya. No te había reconocido. La ultima vez que te vi...
Caleb:Si, fue hace cuatro años. Estas preciosa, ya eres toda una mujer.
Tu:Eh... G-gracias.-pasé mi pelo por detrás de mi oreja con una mano, sonrojándome fuertemente.
Él si que había cambiado un montón. Si, esta bien. A los 14 era realmente lindo pero ahora... Wow!
Tu:Acabas de llegar? Creí que llegarías ayer.
Caleb:No. Llegué ayer. Pero mi vuelo se retraso y vine muy tarde. Probablemente estabas dormida.
Tu:Ah, bueno... Pues... Bienvenido. Vines a estudiar no?
Caleb:Si. Voy a hacer un pequeño curso de derecho.
Tu:Oh, genial.
Caleb:Si. Aunque creo que también aprovecharé para conocer un poco Los Ángeles. Tu eres de aquí no? Te importaría enseñarme algunos lugares? Ya sabes, y así nos conocemos mejor. Nos vemos desde lejos pero apenas hemos hablado.
Tu:Eh... Si. Claro. Me encantaría.
Caleb:Bueno, yo debería irme ya. Son las 7:30 y dentro de poco empiezo.
Tu:Las... 7:45? Oh, no.-Dios! Llegaba tardísimo!- Eh... Yo debo irme así que tambie. Me ha encantado verte, bueno, adiós.
Salí corriendo. Debía llegar en 15 minutos y estaba a media hora.
Eran las 12:30 y estaba subrayando unos papeles y ordenando alunas fotos mientras escuchaba música con los auriculares. Cuando hacia eso me transportaba. Me abstraía del mundo.
Pero de pronto alguien puso su mano en mi hombro.
Tu:Ah!-pegué un brinco.
Ross:Perdona, no quería asustarte.
Tu:R-Ross. Que haces aquí?
Ross:Yo... Quería...
Tu:Necesitas algo?
Ross:Si. Necesito que hablemos.
Tu:Mientras no sea algo del trabajo no tengo nada de lo que hablar contigo.
Ross:Escúchame, por favor. Lo siento, ok? No debí dejar que hicieran eso. Supongo... Supongo que sentía miedo.
Tu:Miedo?-con curiosidad. Por que iba a tener miedo?
Ross:Si. Ya sabes, por... Encajar. Pero tienes razón. Fue horrible. No debí quedarme cayado. No he cambiado. De verdad. Jamás volveré a quedarme cayado ante algo así. Tienes que creerme.
No sabia que pensar. Parecía tan sincero... Y era Ross. La verdad era que por mucho que hubiese cambiado jo lo veía siendo esa clase de persona. Pero... Aun había algo.
Tu:Por que? Por que te importa tanto lo que piense sobre eso?-me miró confundido-No has dejado de tratar de convencerme de que no eres así y no has cambiado. Por que?
Ross:Porque... Eres demasiado importante para mi.
Tu:Q-que?-sonrojándome sin darme cuanta.
Ross:Quiero decir... Eras mi mejor amiga y te aprecio muchísimo. Siempre quise volver a verte y ahora que estas aquí... No quiero perderte de nuevo. Por eso necesito que me creas. No soy así. De verdad.
No sabia si realemnte le creía, pero... No podía evitarlo. Parecía tan auténtico. Sus ojos avellana solo reflejaban sinceridad. Y eran tan hermosos. Digo... Si, ok? Eran lindos. Pero nada mas! Es que acaso no podía hacer una observación?!
No podía creerlo. Estaba teniendo una discusión interna conmigo misma. Justificándome por lo hermosos que me parecían los ojos de Ross. Realmente me estaba volviendo loca. Necesitaba hacer amigos en vez de hablar conmigo misma sobre todo. Y amigos que pudieran durar. No sabia si quiera lo que hacia. Me acercaba a Ross y a los Lynch. Los cuales, en cuanto se enteraran de la verdad, iban a odiarme. Y aun así no podía evitar estar cada vez mas cerca de ellos. Siempre me sentía como en casa. Podía ser yo.
Tu:Yo... Te creo.
Ross:Que? En serio? Genial-me abrazó, levantándome un poco del suelo.
Sin pensarlo me dejé llevar y lo abracé también.
Creo que no nos dimos cuanta pero el abrazo se hizo muy largo.
Ross:Eh... Bueno, me alegra me perdones.-bajándome.
Tu:Eh... Si. Claro. Entonces... Amigos, no?
Ross:MEJORES amigos.
Tu:Bueno, creo que eso ya se verá.
Ross:Que?-sorprendido.
Tu:Vamos, tal vez no seas así pero si que ha pasado mucho tiempo. Y la gente cambia. Hay muchas cosas que no sabemos el uno del otro.
Ross:Oh, vamos. Lo se todo de ti.
Tu:No lo creo. Ross, no me conoces.
Ross:Claro que lo hago.
Tu:Me conocías. No soy la misma. Al igual que tu.
Ross:Yo diría que sigues siendo la misma. Veo... El mismo cabello castaño, los mismos ojos brillantes...
Tu:No me refiero a eso. Nuestros gustos y aficiones pueden haber cambiado mucho. Teníamos seis años. Practicamnte lo único que nos gustaba era jugar.
Ross:Bueno, pero te conozco lo suficiente como para saber donde tienes cosquillas!-me atrapo rodeándome con los brazos y empezó a hacerme cosquillas.
Tu:P-para. Jaja. R-Ross, en...en serio.
Ross:Ok, ok.-riendo.
Tu:Pero sigo pensando que no me conoces.
Ross:Oh, Vamso. Que mas pruebas necesitas?
Tu:Olvídalo.-riendo un poco.
Si seguía con eso podía acabar contándoselo. Y... No quería ver su reacción cuando lo hiciera. Pero sabia que terminaría por enterarse de todo. Y entonces... Me odiaría.
Tu:Bueno, creo que, prácticamente, debería irme ya. Ya casi e acabado y hoy debo volver algo antes a casa.
Ross:Oye, esta todo bien?
Tu:Por que?
Ross:Pues... Nos estabamos riendo y te has puesto seria de pronto. Además, que es lo que se supone que no conozco de tí?
Tu:Nada. Solo decía a pasado mucho tiempo y no sabemos muy bien que ha sido de la vida del otro.
Ross:Y entonces...?
Tu:No me pasa nada. Solo... Estoy algo ocupada y debo irme ya.
Ross:Esta bien. Yo tambie debo irme a casa ya. Puedo llevarte si quieres.
Tu:No! Quiero decir... No es necesario, de verdad. Pero gracias.
Ross:Segura?
Tu:Si. Solo...-de pronto mi teléfono comenzó a sonar.-Perdona.
Tu:Hola?
XXX:Hola. Alexandra?
Tu:Eh... Si. Soy yo. Caleb?
Calen:Si. Perdona. Te llamo en mal momento.
Tu:No. Es solo... Me resulta raro que me llamen así.
Caleb:Oh, entonces... Alex?
Tu:Si. Esta bien.
Caleb:Eh, bueno. Recuerdas que te hablé de salir y eso? Esta tarde hay una exposición en una galería de arte. Te interesaría venir?
Tu:Eh...
Pensé en lo que me había dicho Rydel. Podía aprovechar kara conocerlo y saber si verdaderamente me gustaba.
Tu:Claro.
Caleb:Entonces... Esta tarde a las 18:30, ok? Salimos directamente de tu casa.
Tu:Esta bien. Adiós.
Colgué.
Tu:Disculpa. Era un...amigo.-no sabia si llamarlo así. Realmente no nos conocíamos lo suficiente como para serlo.
Ross:Ah, ya. Bueno, seguro que no quieres que te lleve a casa?
Tu:Tranquilo. Además antes debo acabar aquí.
Ross:Esta bien, entonces nos vemos.
Narra Ross:
(Maya)
Íbamos caminando por la calle cuando me quedé helado. Esa era... Alex? Estaba... Increíble. Más bien, hermosa. Bueno... Si, Ok? Era innegable. Pero... Iba con un chico.
Inexplicablemente sentí que estaba ardiendo. Me sentí... Enfadado? No. Era distinto. Era... Era como si... Se me clavara un puñal. Como una opresión enorme en el pecho.